miércoles, 8 de diciembre de 2010

Primera parada: Zurich.

¡Hola a todos! Sé que es un poquito tarde para hacer un blog-diario, pero entre que las tecnologías no son lo mío, que he estado muy ocupada todo este tiempo y que soy un poco vaga, se me ha ido el santo al cielo. A partir de ahora intentaré actualizar muy a menudo(creo que gracias a la ayuda de mi gran amiga Cris, una blogger profesional, ya le he cogido el tranquillo a esto). 
Mi primera entrada va dedicada a la ciudad de Zurich, a 15 minutos en tren de Winterthur (pequeña ciudad donde vivo). Zurich es como uno de esos rinconcitos del mundo donde a cualquiera le gustaría escaparse unos días...algunos unos meses, y donde a otros como yo no les importaría vivir años. Es una ciudad de cuento, llena de puentes sobre el río Limmat que divide la ciudad en dos y es lugar de paseo de los presumidos cisnes, de edificios estrechos y altos...cada uno de un color, pero siempre manteniendo la estructura de ciudad burguesa y refinada, y como no, he de hablar de los relojes...enormes maquinas que adornan las torres de iglesias, grandes bancos, edificios importantes o incluso catedrales...simpremente son grandes obras de arte. A todo este atractivo propio de la ciudad, se le une el encanto de la Navidad...las luces, los músicos por la calle tocando villancicos, las tiendas de adornos, ¡la nieve!. Por ahora no contaré nada más...dejo el tema de la Navidad para otro día, porque no tiene despercicio, y porque sino me voy a quedar sin temas de los que hablar.

Este fin de semana me iba a ir a esquiar a los Alpes (no me lo monto nada mal, no) pero al final no ha salido el viaje, y aprovechando que ya he reservado un hueco en mi apretada agenda del mes de Diciembre, repleta de trabajos y presentaciones (como podéis comprobar y como pude comprobar yo hace unas semanas, el Erasmus no es sólo fiesta y diversión), me dispongo a comprar un billete de tren para ir a ver a mi tía Pati y a los diabólicos de mis primos este fin de semana. Hoy la he llamado y creo que le ha hecho bastante ilusión la idea.

Así que ya hasta la próxima. Espero que os guste este diario, creo que será una buena forma de que tengáis noticias mías. 

Para mis abuelos, abuela Ter, papá y mamá y toda la gente que se preocupa, deciros que estoy muy bien, muy contenta e ilusionada, que aunque me salgan herpes estoy sana y que estoy intentando aprovechar el tiempo lo máximo posible.

Muchos besos a todos.

¡Nos vemos pronto!

4 comentarios:

  1. por cierto, mamá, no te asustes que toda esa bolsa de chuches no es sólo para mí.

    ResponderEliminar
  2. ahh, ya nos parecia que estabas demasiado flacucha para comer a base de chuches!

    ResponderEliminar
  3. Me ha encantado. Está muy bien escrito y refleja perfectamente lo feliz que estas y lo maravilloso que es ese sitio. Estoy súper orgullosa de ti. Sigue escribiendo porque hace que te sintamos más cerca. Guárdame unas poquitas chuchee. TE QUIERO MUCHO. Hasta pronto. Un beso

    ResponderEliminar
  4. espero q sigas actualizando y nos mantengas a todos informados!! que ganas de que lleguen las navidades y vengais! jeje fui culpable de parte de esa bolsa de chuches...jaja un besito helen!!

    ResponderEliminar